Apocalipsis
Apocalipsis
Yo soy el Alfa y la Omega,
el principio y el fin, el primero y el último. [1]
Nadie ha visto al Padre
sino el Hijo y aquel a quien quiera revelarlo y para ganar la vida eterna la misión de Él resucitado, si le creemos
y confesamos es presentarnos a Dios[2]. Sin embargo algunos engañados e incrédulos lo ignoran y creen en
las apariciones rechazando que la fe es por el oír, y el oír, por la Palabra de Dios[4]. Haciendo una religión con toda una doctrina humana
de santuarios y peregrinaciones que son sinónimo de desobediencia. Porque Dios
busca a los verdaderos adoradores que adoraran en Espíritu y en verdad.[3]
Ser Eterno es la
principal característica del Padre; eso quiere decir que no tiene principio ni
fin y quien habla en el primer párrafo no conoce ni tiene la más remota idea de
quién es el Padre y menos el Hijo porque hasta lo confunde con un ángel y se
postra.
El autor del Apocalipsis a cumplido el
sueño de los escritores hacer conocida una historia que fue leída por millones
sobre la que hasta hay comentarios e interpretaciones, al igual que la
Caperucita Roja, un cuento popular que en el fondo tiene una moraleja, pero no
deja de ser ficción literaria por eso no es palabra de Dios.
Siete planetas en otro sistema solar |
Las probabilidades de que
alguien muera el día en que nació eran de una en 30 millones y aquella cantidad
de habitantes tenía la Tierra cuando durante una Pascua nace Jesús de Nazaret.
En veinte siglos hemos llegado a la suma de 7 mil millones calculándose que
para el año 2030 estaremos sobre los 8 y eso significa qué el mundo estaría
quedando pequeño para albergarnos a todos y una manera inconsciente de
controlarla fueron las guerras por esa razón hay una potencia que se compra el
lio defendiendo la "libertad". El día que otras haga lo mismo por
exis motivos que en el fondo será sobrepoblación se acabó la paz en el mundo. Y
previendo aquello mencionamos la ley de simetría que se cumple en mecánica
cuántica que nos dice que todo se repite por equilibrio en niveles más
profundos de su universo. Si la extrapolamos a la clásica significaría que hay miles
de sistemas solares y nosotros creados por Dios tendremos el privilegio de
plantar vida en ellos empezando por Marte.
Que este año y los que vienen Dios
nos ayude a cambiar paradigmas para crecer como las estrellas como le ofreció a
Abraham el padre de la fe.
Comentarios
Publicar un comentario